Canterbury, New Hampshire, ofrece una escapada serena a la naturaleza con una variedad de actividades al aire libre adecuadas para familias e individuos. Uno de los puntos destacados es el Canterbury Shaker Village, donde los visitantes pueden explorar el sitio histórico que muestra la vida de los Shakers en el siglo XIX. El pueblo cuenta con hermosos jardines y senderos que brindan un vistazo a la simplicidad y la artesanía de esta comunidad única, convirtiéndolo en un destino educativo y pintoresco.

Para aquellos que disfrutan del senderismo, el cercano Mount Kearsarge State Forest, ubicado a unos 30 minutos, ofrece numerosos senderos adecuados para todos los niveles de habilidad. Los senderos varían en dificultad y ofrecen vistas impresionantes del paisaje circundante, especialmente en otoño, cuando el follaje se transforma en vibrantes tonos de rojo y dorado. Las familias pueden llevar un picnic y disfrutar de un día al aire libre, aprovechando el aire fresco y la belleza escénica.

Otra joya local es el hermoso Lake Wicwas, a solo un corto trayecto en auto desde Canterbury. Este tranquilo lago es perfecto para nadar, hacer kayak o simplemente relajarse junto a la orilla. Las aguas tranquilas y los bosques circundantes crean un ambiente ideal para un día familiar. También hay puntos de acceso público que permiten la pesca, lo que lo convierte en un gran lugar para quienes buscan disfrutar de un día pacífico junto al agua.

Para una actividad divertida y económica, los numerosos parques de la ciudad ofrecen amplios espacios para que los niños jueguen y las familias se reúnan. Estos parques a menudo cuentan con áreas de juegos, campos abiertos y zonas de picnic, lo que los hace perfectos para una tarde tranquila. Las familias pueden llevar juegos o simplemente disfrutar del entorno natural mientras los niños juegan.

Si el clima se torna lluvioso, la zona aún tiene opciones para la exploración en interiores. La cercana New Hampshire Historical Society en Concord, aproximadamente a 20 minutos, ofrece exposiciones interesantes sobre la rica historia del estado. Esta puede ser una excelente manera de pasar una tarde aprendiendo sobre la cultura e historia local mientras se permanece seco.

A medida que cambian las estaciones, también lo hacen las actividades disponibles en y alrededor de Canterbury. En invierno, las familias pueden disfrutar de raquetas de nieve o esquí de fondo en los parques estatales cercanos. El paisaje de la zona se transforma en un país de las maravillas invernales, proporcionando una forma completamente diferente de experimentar la belleza natural de New Hampshire.

Al visitar Canterbury y sus alrededores, es importante respetar el medio ambiente. Seguir la etiqueta local incluye ser consciente de los niveles de ruido, especialmente en áreas residenciales, y observar la vida silvestre desde una distancia segura. Practicar los principios de “Leave No Trace”, como limpiar después de uno mismo y permanecer en senderos designados, ayuda a preservar la belleza natural para futuros visitantes. Al ser considerado con la naturaleza y su entorno, se puede asegurar que Canterbury siga siendo un hermoso destino para que todos lo disfruten.